Con la liberalización del mercado en 1997, se estableció un mercado mayorista de compra-venta de electricidad gestionado por OMIE. Este mercado, conocido como "pool" o "piscina", opera en base a la orden de fuente de electricidad, desde la más barata a la más cara, para cubrir la demanda. Las principales empresas vendedoras y compradoras de energía eléctrica en este mercado son Endesa, Iberdrola, Naturgy, Total Energies, EDP y Repsol.
Cada día, OMIE realiza una subasta para las 24 horas del día siguiente, priorizando las energías renovables seguidas de otros sistemas de producción. La energía nuclear tiene prioridad debido a su inercia térmica, mientras que las energías renovables están promovidas por regulaciones legales. El gas y el carbón son las energías más caras y su orden de entrada depende de la demanda. La última fuente en cubrir la demanda marca el precio marginal de la energía para ese día.
En 2021, el 60% de los consumidores eléctricos tenían contratos en el mercado libre. Las principales comercializadoras en el mercado son Endesa, Iberdrola, Naturgy, Total Energies, EDP y Repsol. Además de estas, existen más de 270 comercializadoras en España que buscan ganar presencia en el mercado libre.
El consumo de electricidad en España ha experimentado cambios a lo largo de los años debido a factores económicos y políticas de eficiencia energética. Los precios de la electricidad se basan en la suscripción, la energía consumida y los impuestos y contribuciones. Cada proveedor factura a sus clientes según estos elementos, y el cliente puede elegir opciones tarifarias según sus necesidades.
La tercera parte de la factura de electricidad corresponde a impuestos y contribuciones que se destinan al Estado. El impuesto eléctrico ha sido objeto de medidas para proteger a los consumidores del aumento del precio de la luz. Sin importar la compañía eléctrica o distribuidora, el impuesto debe ser pagado por todos los usuarios.
Debido a la complejidad y la evolución del mercado eléctrico, muchos consumidores no se toman el tiempo para leer y comprender sus facturas en detalle. La diversidad de opciones y partes involucradas puede resultar abrumadora y complicar el proceso de facturación.